En épocas de home office y trabajo remoto, uno de los sentimientos que puede aparecer es el de soledad, o soledad no deseada. Se define de muchas maneras: como el sentimiento que nos embarga, de una forma negativa, cuando las ganas de compartir con otras personas no se concretan, o también como un sentimiento no deseado de falta o pérdida de compañerismo, o un desajuste entre la cantidad y calidad de relaciones sociales que tenemos, y aquellas que queremos. ¿Por qué esto es relevante en los lugares de trabajo y no solamente un conflicto subjetivo de una persona? Porque la soledad no deseada en el trabajo afecta las decisiones que tomamos, cómo razonamos acerca de hechos y relaciones, obstruye un pensamiento creativo y limita el rendimiento. Por el contrario, cuando existen buenas conexiones entre compañeros de trabajo, el compromiso aumenta, se reduce el ausentismo y crece la calidad del trabajo realizado. 

Algunas de las situaciones que pueden generar soledad no deseada son el desempleo, cambiar de trabajo, dejar la universidad, convertirse en padre o madre, recibir un diagnóstico médico de una enfermedad, mudarse a otra ciudad, y también un entorno de incertidumbre. Si bien no todas se originan en el trabajo, todas pueden influir en él.

Un libro publicado en 2022, cuando la pandemia ya retrocedía, pero que es muy útil hoy, cuando sus efectos se siguen percibiendo, se llama Connectable: How Leaders Can Move Teams From Isolated to All In, de Ryan Jenkins y Steven Van Cohen. Los autores resumen su metodología, mostrando qué es lo que está causando la soledad actual, el papel que juega la inclusión para resolverla y cómo puede disminuir la soledad y aumentar la pertenencia, el compromiso y el desempeño de los empleados en todos los niveles. 

Revelan, además, la importancia de Identificar a los empleados solitarios o con burnout, de construir seguridad psicológica dentro de un equipo, de crear ambientes de pertenencia e inclusión, cultivar conexiones significativas entre los miembros del equipo (en persona o de forma remota) y de construir organizaciones comprometidas, impulsadas y de alto rendimiento utilizando el Less Loneliness Framework de cuatro pasos patentado por los autores:

1. Observe la soledad y tome conciencia de sus impactos.

2. Invierta en conexión y cree espacios seguros para la conexión en el lugar de trabajo.

3. Limite su enfoque y cree más claridad sobre lo que es importante.

4. Encienda el impulso y continúe enfocándose en la conectividad.

Además, remarcan, sobre la soledad en los lugares de trabajo, que

- Cuando priorizamos la comodidad sobre la conexión, no nos estamos haciendo ningún favor. Deberíamos priorizar el uso del tiempo ahorrado para reinvertirlo en conexiones significativas. 

- Ya sea introvertido o extrovertido, realmente no hay diferencia en la necesidad de conexión de las personas. Si bien los introvertidos manejan mejor la soledad, aún necesitan una conexión significativa. 

- Nuestras habilidades sociales son como un músculo que debemos ejercitar y, al salir de la pandemia, debemos ser más intencionales en el desarrollo de nuestras habilidades y conexiones sociales para reducir la soledad. 

- Los líderes pueden tener un gran impacto en la prevención de la soledad en la fuerza laboral al crear más oportunidades de aprendizaje, compromiso y conexión social. 

¿Se puede medir la soledad no deseada?

Ryan y su equipo crearon una Evaluación de conexión de equipo, que es una prueba anónima que proporciona al liderazgo una evaluación honesta de qué tan bien están conectados los miembros del equipo con otros miembros del equipo, con el liderazgo y con la organización misma. 

Por otro lado, la organización británica What Works Wellbeing generó también un sistema para medir la soledad. Las siguientes 4 preguntas, identificadas a través de un proceso de consulta, conforman una medición nacional de soledad en Gran Bretaña. Este test incluye tres preguntas indirectas y una pregunta directa. Las primeras tres interrogan a las personas indirectamente sobre las emociones asociadas con la soledad (no mencionan la palabra "solitario"). La cuarta pregunta se formula directamente sobre los sentimientos de soledad. 

1 Con qué frecuencia siente la falta de compañerismo?

2 Con qué frecuencia siente que es excluido/a? 

3 Con qué frecuencia siente que está asilado/a de otras personas?

4 Con qué frecuencia se siente solo/a?

Estas preguntas se utilizan de manera consistente, lo que permite ir siguiendo la evolución de este sentimiento, además de poder comparar situaciones particulares con la media nacional. En la Argentina, el fenómeno está mayormente estudiado en el universo de los adultos mayores y de los adolescentes, pero lo cierto es que es transversal a todas las edades, aunque afecta más a adultos mayores y adultos jóvenes. Es más frecuente en las mujeres que en los hombres, y también afecta en mayor medida a las clases más desfavorecidas.